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Análisis del Texto Libre
El análisis del Texto Libre y su interpretación, además que el inicio posible de un proceso creativo, es una manera para conocernos en profundidad y tomar más conciencia de nosotros mismos. Si bien en un primer momento este análisis pueda ser individual, es muy efectivo buscar y vivir espacios comunes donde activar un análisis colectivo.
Aunque reconocerse en lo que escribimos de manera libre puede inquietar, el ejercicio libera la mente y permite "ver" con más claridad.
Cuando vislumbramos, en lo que escribimos de manera libre, los mecanismos automáticos que condicionan nuestra vida y logramos dejarlos a un lado, depuramos paso a paso lo que es nuestro sentir auténtico, limpiamos los canales perceptivos, afinándolos así para futuras relaciones transparentes con el mundo y sus detalles.
Para ese fin, es útil leer más veces y analizar con atención y en profundidad el texto que escribimos. Si hay una narración lineal y consecuente, podemos intentar dar más importancia a las imágenes "parásitas". También podemos emprender un análisis "lógico", por ejemplo contando las palabras o incluso las letras utilizadas, y encontrando algún tipo de relación entre ellas. O seguir otros caminos analíticos.
Mientras tanto, es importante tomar apuntes en otra hoja, anotando también todas las dudas relativas que surjan.
Durante el proceso de análisis e interpretación, podemos concentrarnos antes en lo que sentíamos al escribir el texto, y después en cómo lo redactamos en el papel.
Podemos preguntarnos, por ejemplo:
¿Cómo me sentía mientras estaba haciendo eso? ¿Qué fluyó y qué no? ¿Me sentía bloqueado por algo?
¿Estaba concentrado o desconcentrado? ¿Estaba preocupado por esconder algo?
¿Cómo percibía las miradas de los demás mientras lo hacía? ¿Estaban presentes? ¿Me preocupaban?
¿Cuáles sentidos se activaron? ¿Cuáles emociones? ¿Cuáles dominaban?
¿Cómo influyeron las percepciones sensoriales? Ver un rayo de sol, sentir un olor, escuchar un ruido, ¿qué me provocó? ¿Revitalizó algo en mi memoria?
¿Cuáles sentimientos, estados de ánimo o emocionales estaban presentes? ¿Eran previos o nacieron durante la redacción?
¿Qué siento cuando leo lo que escribí? ¿Qué me evoca? ¿Qué sensaciones revivo?
¿Prestaba más atención a lo que veía o a lo que pasaba en mi interior?
¿Es un texto descriptivo o introspectivo? ¿Hacia el exterior o el interior? ¿Vive en el tiempo presente, el pasado o el futuro?
¿Cuál es el punto de vista: yo, el otro, el ambiente?
¿Por qué me surgieron o me concentré en esas determinadas realidades e ignoré o no vi otras diferentes?
¿Entreveo algo más allá de las palabras que escribí?
¿Dónde estoy yo en lo que escribí? ¿Dónde no soy yo?
¿Cuáles fórmulas, máscaras, etiquetas, definiciones se manifiestan?
¿Estaba preocupado por lo que redactaba, por la forma, por su lógica, por buscar coherencia?
¿Cómo escribí en la hoja? ¿De manera ordenada o con una disposición libre de las palabras? ¿Qué me sugiere esa disposición?
En un análisis colectivo, después de escribir el Texto Libre en el mismo momento y lugar de los otros del grupo - por ejemplo durante un taller - algunas otras preguntas posibles son:
¿Por qué él vio o percibió eso y yo no lo vi?
¿Por qué no vio lo que para mí era tan evidente?
¿Qué ven ustedes en lo que escribí?
Y mil otras preguntas que surjan durante la reflexión.
Cada palabra del texto invita a un "por qué" y a un auto-análisis, cada interpretación a un descubrimiento.
